Alopecia nerviosa o Alopecia por estrés

¿En verdad se nos puede caer el cabello por estrés?

5 de mayo del 2022

Por: Dra. Karen Jimenez

De acuerdo a la Fundación Mexicana para la Dermatología se entiende por alopecia a la pérdida del cabello, la cual se puede dividir en 2 tipos: cicatrizal y no cicatrizal. En el caso de la alopecia nerviosa se trata de una alopecia no cicatrizal y  por lo tanto puede ser reversible.

Son muchos los factores que influyen en la pérdida de cabello, entre los cuales se encuentran la falta de sueño, una alimentación deficiente en nutrientes, consumo de diversas sustancias (ej: alcohol, cafeína, bebidas energéticas), sin embargo el factor más importante en la alopecia nerviosa es el cortisol.

Tras mantener niveles elevados de estrés durante un período de tiempo continuo (al menos 6 meses), es posible encontrar cantidades superiores de cortisol en sangre,  hormona que nuestro cuerpo libera ante situaciones de estrés o peligro. En el cuero cabelludo, el cortisol afecta la circulación de la sangre, alterando la correcta absorción de nutrientes por  del folículo piloso, resultando en una alteración del ciclo normal del cabello; es decir, algunos cabellos que se encontraban en fase de crecimiento o anágena pasarán de forma brusca a la fase de caída o telógena, lo cual da como resultado caída de cabello.

¿Cómo saber si es alopecia por estrés?

Para poder atribuir la caída del cabello al estrés, además de percibir mayor caída de cabello, se deberán presentar síntomas propios de un cuadro de estrés; de acuerdo a la  Asociación Estadounidense de Psiquiatría los síntomas más comunes son los siguientes:

• Irritabilidad, cansancio y fatiga
• Problemas digestivos tales como diarrea y/o estreñimiento, acidez estomacal
• Insomnio
• Sudoración excesiva y aumento de la frecuencia cardíaca
• Piel reseca y episodios de dermatitis o molestias cutáneas
• Pérdida de vitalidad y volumen del cabello

Vale la pena definir que lo normal en cuanto a la caída del cabello, de acuerdo a la Asociación Mexicana de Dermatolología es de entre 80 y 100 cabellos diarios; cuando aumenta la cantidad de cabello que dejamos en la ropa, almohada, cepillo, o al bañarnos, es común que se perciba fácilmente por parte del paciente, y en ese caso es recomendable buscar atención médica para detener la caída del cabello o aumentar la densidad capilar.

¿Cómo tratar la Alopecia Nerviosa?

Se debe buscar mejorar nuestros hábitos y estilo de vida, por ejemplo llevar una dieta rica en nutrientes y balanceada, hidratarnos adecuadamente, dormir suficiente (entre 6 y 8 horas diarias es la recomendación de la Asociación Mexicana de Psiquiatría), manejo del estrés (ya sea con terapia farmacológica, ocupacional, conductual o mixta); estas acciones favorecerán por sí solas a la recuperación del cabello.

Ahora bien, lo cierto es que en ocasiones no es posible o al menos no es tan sencillo modificar ciertos aspectos de nuestro estilo de vida, afortunadamente existen diversos tratamientos para la pérdida o adelgazamiento del cabello, tales como:

• Tratamientos tópicos (lociones, shampoos, ampolletas)
• Mesoterapia (inyecciones de vitaminas, factores de crecimiento de células mesenquimales o derivados de plaquetas),
• Farmacológico (vía oral o inyectado)

Recuerda que antes de tomar cualquiera de estos tratamientos, siempre es conveniente ser valorado por un experto, para que determine el motivo de la caída del cabello,  y se indique el tratamiento más adecuado.